Saltar al contenido

¿Existe el Alcohol Saludable? Descubre las 9 Opciones Más Aceptables

Coctails de colores con la playa de fondo

Cuando hablamos de alcohol y salud, es importante partir de una realidad clara: ninguna bebida alcohólica es completamente saludable. Su consumo excesivo puede tener consecuencias graves, tanto a nivel físico como mental, y es una de las principales causas de enfermedades evitables en el mundo. Sin embargo, algunos estudios han encontrado ciertos beneficios en el consumo moderado de algunas bebidas, siempre y cuando se tomen en pequeñas cantidades y en contextos puntuales.

¿Significa esto que hay “alcohol saludable”? No exactamente, pero sí hay opciones más aceptables que otras si decides brindar de vez en cuando. En este artículo, repasamos 6 de las bebidas alcohólicas que, consumidas con moderación, se consideran más “ligeras” por su bajo contenido calórico o por los compuestos con potencial antioxidante que contienen:

Vino Tinto: antioxidante natural

Desde mucho antes de que se pusiera de moda hablar de superalimentos, el vino tinto ya tenía fama de ser «bueno para el corazón«. Y lo cierto es que la ciencia respalda, en parte, esa creencia popular. Esta bebida está cargada de polifenoles como el resveratrol, un potente antioxidante que ayuda a proteger el sistema cardiovascular. Tomado con moderación, puede mejorar la circulación, reducir el colesterol malo y, según varios estudios, incluso favorecer la memoria y la función cognitiva en personas mayores. Así que, si eres de los que disfruta de una copa tranquila al final del día, tu ritual podría tener más beneficios de los que imaginabas.

Vino rosado: sabor suave, beneficios reales

El vino rosado no es solo una opción bonita y refrescante para los días de calor, también tiene algunos beneficios interesantes. Al igual que el tinto, puede ayudar a reducir el colesterol y a proteger la salud cardiovascular si se consume con moderación. Además, contiene potasio, un mineral esencial para el equilibrio del organismo. Su ventaja frente al tinto es que suele tener menos calorías, lo que lo convierte en una opción más ligera para quienes buscan cuidarse sin renunciar al placer de una copa. Eso sí, aunque tiene menos antioxidantes que el vino tinto, sigue siendo una alternativa a tener en cuenta.

Cava: burbujas con beneficios

El cava, también conocido como el “champagne español”, es un vino espumoso que no solo alegra las celebraciones, sino que también podría tener algunos beneficios para la salud. Rico en antioxidantes, se ha relacionado con mejoras en la circulación y la reducción de la inflamación. Si eliges su versión brut (la más seca), tendrás una bebida con menos azúcar y más amable con tu cuerpo. Estudios han señalado que su consumo moderado podría proteger la salud cardiovascular, reducir el riesgo de diabetes y, sorprendentemente, incluso mejorar la memoria a corto plazo. Todo con moderación, claro… ¡pero brindar con cava puede ser un pequeño placer con buen respaldo!

Whisky: bajo en carbohidratos

El whisky, además de tener un sabor profundo y elegante, es una bebida con algunos beneficios curiosos si se consume con cabeza. Al ser destilado, no contiene grasas ni carbohidratos, lo que lo hace compatible con dietas bajas en azúcares. También se le atribuyen antioxidantes como el ácido elágico, que ayudan a combatir el envejecimiento celular. Algunos estudios han sugerido que su consumo moderado podría reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso de demencia en la vejez. Eso sí, el secreto está en la cantidad: una copa ocasional, y sin añadidos azucarados, puede ser una opción más ligera para brindar.

Gin tonic: clásico y ligero

El gin tonic es una de esas bebidas que nunca pasan de moda. Su combinación de ginebra y agua tónica no solo es refrescante, también puede tener un perfil calórico más bajo que otros cócteles, especialmente si se opta por tónicas sin azúcar o bajas en calorías. Además, la ginebra contiene botánicos naturales, como el enebro, a los que se atribuyen propiedades antioxidantes y digestivas. Eso sí, la clave está en la moderación… y en elegir bien los ingredientes para mantener su versión más saludable.

Sidra: sabor natural y toque afrutado

Elaborada a partir de manzanas fermentadas, la sidra es una bebida con tradición y personalidad. Su sabor afrutado la convierte en una alternativa refrescante y más suave que otros alcoholes. Además, aporta antioxidantes naturales presentes en la manzana, y suele tener menos alcohol y calorías que el vino o la cerveza. Por eso, si buscas una opción ligera para brindar sin excesos, la sidra puede ser tu mejor aliada.

Cócteles con zumo natural: equilibrio con sabor

Algunos cócteles elaborados con zumos naturales, como el mojito con lima fresca o un screwdriver con zumo de naranja, pueden aportar vitamina C, antioxidantes y un toque refrescante que los hace muy apetecibles. Eso sí, la clave está en moderar el uso de azúcar o siropes para que no pierdan su “toque saludable”. Con ingredientes frescos y bien equilibrados, estos cócteles pueden ser una alternativa más consciente para quienes no quieren renunciar al sabor.

Tequila

El tequila, además de ser un clásico, tiene algunas curiosidades que lo hacen destacar frente a otras bebidas alcohólicas. Por ejemplo, es una de las opciones con menos calorías, lo que lo convierte en un aliado más ligero si estás cuidando tu peso. Además, al estar hecho a base de agave —una planta cuyo azúcar no eleva los niveles de glucosa en sangre—, algunos estudios han sugerido que podría ayudar a controlar el azúcar y, en ciertos casos, incluso favorecer la pérdida de peso. Eso sí, esto no es una invitación a beber sin control: como siempre, la clave está en la moderación. Un solo shot puede bastar para disfrutar… sin pasarse.

Ron

Más allá de las leyendas de piratas y canciones marineras, el ron ha sido una bebida muy popular durante siglos. Se cuenta que en altamar lo mezclaban con agua para prevenir enfermedades como el escorbuto o la gripe, y también para calmar los nervios. Hoy en día, algunos estudios sugieren que, en pequeñas cantidades, el ron podría tener ciertos beneficios: ayudar a mantener la presión arterial en niveles saludables, reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares e incluso disminuir las probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2. También se ha mencionado su posible efecto sobre la salud bucal, aunque aún se necesita más investigación para confirmar todo esto. Como siempre, la clave está en la moderación.

Como ves, la cerveza ni aparece en la lista.
Tal vez ha llegado el momento de replantearte tu bebida favorita….

Eso sí: la clave siempre está en la moderación. Disfrutar de estas bebidas de forma ocasional y responsable puede encajar en un estilo de vida equilibrado. Y recuerda, si tienes alguna condición médica o tomas medicación, lo mejor es consultar con un profesional antes de levantar la copa.

¡No te pierdas ni una sola novedad! 🌸 Síguenos en Instagram, TwitterFacebook para estar siempre al día. 💗 Descubre las mejores ofertas y Tendencias Beauty al instante en nuestro canal de TelegramNos vemos por allí


Adriel R.