Con la llegada de la primavera, todos hemos escuchado los consejos sobre cómo protegernos del sol. Nos han dicho una y otra vez que no salgamos sin protección solar, que es mejor permanecer a la sombra durante ciertas horas del día…
A pesar de todas estas advertencias tenemos que reconocer que nos encanta el sol y es difícil resistirse a disfrutar sus rayos. Sin embargo, exponernos al sol sin la debida protección puede provocar quemaduras solares y una incómoda sensación de piel irritada.
Mientras juramos no volver a salir sin crema solar, te dejamos algunos consejos para aliviar los síntomas y cuidar tu piel:
5 trucos para aliviar la piel quemada por el sol
1. Usa compresas frías
Las compresas frías son un remedio fácil y eficaz para calmar la piel quemada. Si buscas una opción nutritiva y suave para tu piel, puedes probar con una compresa de leche, que contiene vitaminas y ácido láctico. También puedes probar con una compresa de yogurt, aunque algunos dermatólogos recomiendan la leche entera o en crema. ¡Pero ten cuidado de no frotar!
Una compresa con leche también puede ayudar a calmar la piel inflamada, ya que la leche contiene vitaminas A y D, grasa, aminoácidos y ácido láctico, así como proteínas, suero y caseína. Las vitaminas promueven la curación, mientras que el ácido láctico induce a la piel a eliminar las células muertas, lo que significa que se requiere menos esfuerzo del sistema inmune para repararlas.
Algunos dermatólogos sugieren que las enzimas del yogurt también pueden ser útiles, mientras que otros apuestan por la leche entera o en crema, que consideran las mejores opciones porque la grasa que contienen puede atrapar el calor. Lo que debemos hacer es verter un poco de leche en un bol, echar un paño y refrigerar hasta que la leche se haya empapado suficientemente y esté frío. Presiona suavemente sobre la piel quemada por el sol, con cuidado de no frotar.
El agua con hielo también puede funcionar para una compresa fría, pero no es tan suave ni nutritiva para la piel como la leche. Si lo haces, no obstante, NO debes aplicar el hielo directamente sobre la piel, ya que una ducha o baño fría puede ayudarte a refrescarse, pero el hielo puede adherirse a tu dermis y causarte más daño.
2. Áloe vera
El áloe vera es uno de los remedios más populares para las quemaduras solares. El gel de áloe vera es muy efectivo para aliviar el dolor y reducir la inflamación gracias a su efecto refrescante natural. Proporciona un alivio relajante e instantáneo, ayudando a acelerar la regeneración de la piel.
El colágeno presente en esta planta en grandes cantidades acelera la regeneración de la dermis. Para usar este remedio, puedes comprar el gel o cortar una rama de la planta y aplicar la pulpa donde te hayas quemado por el sol.
Lo puedes aplicar directamente sobre la piel afectada para refrescarla y aliviar la comezón y el ardor.
3. Hidratación
Beber mucha agua es fundamental para mantener la piel hidratada y saludable, especialmente después de una exposición prolongada al sol. Además, puedes aplicar cremas hidratantes específicas para quemaduras solares para ayudar a la piel a recuperarse más rápidamente.
En cuanto a las cremas calmantes, evita aplicarte productos terminados en “-caína”, como la benzocaína. Estas cremas pueden irritar la piel o causar una reacción alérgica. La benzocaína se ha relacionado con una enfermedad poco frecuente aunque potencialmente mortal que disminuye la cantidad de oxígeno que la sangre puede transportar (metahemoglobinemia).
4. Descansar
Si te has quemado por el sol, es importante que descanses y evites la exposición directa al sol durante unos días. Descansa en un lugar fresco y oscuro para reducir la inflamación y la irritación de la piel.
5. Antiinflamatorios
Si tienes una quemadura solar muy dolorosa, puedes tomar medicamentos antiinflamatorios como el ibuprofeno para reducir la inflamación y el dolor. Recuerda que es importante seguir las dosis recomendadas por el médico.
Los medicamentos antiinflamatorios de venta libre, como el ibuprofeno, también reducen la hinchazón y la irritación de una quemadura solar y «pueden calmar la inflamación desde adentro hacia afuera»
Recuerda que lo más importante es prevenir las quemaduras solares. Usa protector solar de alta calidad, evita la exposición al sol en las horas de mayor intensidad y cubre tu piel con ropa adecuada. Si a pesar de todo, te quemas, sigue estos consejos para aliviar el dolor y acelerar la recuperación. ¡Tu piel te lo agradecerá!
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